STREET
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Post-graffiti iconográfico
OTTSTUFF fusiona los lenguajes del diseño gráfico y el graffiti iconográfico, creando un universo onírico y minimalista, donde el color ejerce como principal fuerza expresiva. Entre sus influencias creativas, destacan el graffiti iconográfico, el surrealismo y el minimalismo, inspirado también por la arquitectura y la naturaleza. Desarrollado en el espacio público, el lenguaje artístico aproxima el post-graffiti iconográfico hacia un surrealismo minimalista, orientando sus intervenciones a la mejora de nuestra relación cotidiana con el entorno.
Icono mutable.
Como principal icono de OTTSTUFF, destaca el rostro en silueta, un icono mutable que le permite abordar diversas temáticas relacionadas con la esencia humana desde la equidad, prescindiendo de diferenciaciones estereotipadas, y utilizando el entorno como elemento semántico. El punto, elemento primario de expresión artística, es otro de los elementos iconográficos más característicos del artista, que conjuga en la mayoría de sus obras. Leer más [+]
Poesía y retórica visual.
Junto al uso del color, la poesía y la retórica visual son aportes esenciales del diseño gráfico al lenguaje creativo de OTTSTUFF. La búsqueda de una experiencia estética autotélica, originada a través del juego, constituye el punto de partida y fin: el proceso creativo es un fin en si mismo. El icono evoluciona como elemento retórico, y el entorno supone un elemento semántico fundamental. Destaca el uso de figuras literarias como la prosopopeya, la anáfora o la alegoría. Leer más [+]
¿Por qué post-graffiti?
Detrás del graffiti, hay distintas personas, circunstancias e inquietudes creativas, y la creatividad no entiende de compartimentos estancos. Es inevitable que el graffiti evolucione y se fusione con otras pasiones o conocimientos, paralelamente al desarrollo personal y profesional del individuo, generando nuevas variantes. Sin embargo, a nivel colectivo, es necesario diferenciar y salvaguardar el término "graffiti" como fenómeno independiente. Leer más [+]
Muralismo participativo
El movimiento muralista Community Mural, que emergió en Chicago (Estados Unidos) a finales de la década de 1960, concibió el proceso artístico como estímulo para un proceso social que va más allá de lo estético. El propósito de estas intervenciones es unir a artistas y comunidades a través de un proceso colaborativo, enraizado en la tradición del muralismo, para crear arte que transforme los espacios públicos o compartidos y la vida de los individuos que en ellos habitan.
MISIÓN
Crear en comunidad, crecer en comunidad.
Desarrollo creativo orientado a la consecución de un fin común, fomentando la convivencia y promoviendo valores positivos.
VISIÓN
El arte como herramienta de cambio social.
Enfocar el proceso creativo como experiencia humana compartida, capaz de mejorar las relaciones comunitarias, contribuir al desarrollo interpersonal y fortalecer el sentimiento de comunidad.
APLICACIONES
Adaptable a diversas comunidades y entornos.
Herramienta de activación social y cultural, educación creativa, y team-building. Mejora los vínculos humanos a través de murales participativos en espacios compartidos y de uso común (escuelas, empresas, iniciativas vecinales, etc.).
Muralismo ilustrativo
Otra línea de intervenciones artísticas en el espacio público,
de carácter más ilustrativo.
El trazo, relegado a un segundo plano en su línea de trabajo más icónica, desempeña aquí un papel protagonista, vinculado estrechamente al de sus proyectos de ilustración realizados con tinta y lejía, permitiéndole incluso reinterpretar muchas de las obras realizadas con dicha técnica, ampliando la paleta de colores hacia una estética más urbana. Los puntos de colores, elementos recurrentes en la línea icónica, también aparecen en en esta vertiente, estableciendo una conexión entre las distintas intervenciones urbanas, extendiendo así el universo creativo del artista.
Muralismo artístico
Encargos artísticos y decorativos.
El muralismo tiene la capacidad de evocar y construir espacios, poniéndolos en valor y dotándolos de una dimensión artística. A diferencia de los fotomurales y de los vinilos, los murales pintados a mano van más allá de la decoración, al tratarse de obras únicas e irrepetibles, que aportan un valor añadido por su carácter humano y artístico. OTTSTUFF aborda este tipo de proyectos desde un estilo figurativo con ecos expresionistas, trasladando tradicional gesto del pincel a la brocha y el rodillo, configurando una estética cuya frescura reside a caballo entre lo clásico y lo moderno.
Siempre abierto a nuevos proyectos
